Un bonito día familiar en Lezo (Gipuzkoa)

Aun siendo el pueblo más pequeño de la comarca de Oarsoaldea, Lezo cuenta con varios atractivos: el centro histórico, rutas por la naturaleza y la gastronomía, entre otros. Por lo tanto, oportunidades para satisfacer todos los gustos.

A continuación, te proponemos un plan para pasar un día familiar fantástico en Lezo:

3 sencillos itinerarios por la naturaleza

Podemos comenzar el día con una pequeña vuelta al monte por la mañana, ya que la naturaleza también tiene gran importancia en el municipio. Os proponemos tres sencillos itinerarios para conocer los espacios naturales de Lezo. Son de diferente distancia y dificultad y además de disfrutar de la naturaleza, encontraremos elementos históricos y culturales de gran valor. Como punto de partida se encuentra el polideportivo Bekoerrota, donde encontraremos un plano con las explicaciones precisas de estos 3 recorridos.

El recorrido de Altamira-Bordatxo tiene una longitud de 3,4 km y al ser un camino asfaltado, todo el recorrido se puede realizar en bicicleta. Un recorrido sencillo y una oportunidad única para disfrutar del medio rural y del paisaje natural de Lezo e ideal para ir con los niños y las niñas. El recorrido Olatzar-Lorbide también es adecuado para pequeños, con una distancia de 4,5 km. En el camino se pueden ver caseríos de gran valor arquitectónico y la fuente de Plataiturri, entre otros. Para finalizar, el recorrido más largo, denominado Xoxolurra-Alarguntza, es un recorrido de 11 km que discurre por la ladera del monte Jaizkibel. Aquí se encuentran los restos de barracones de esclavos, utilizados para dormir por los “trabajadores” que construyeron, en época del régimen, la carretera que lleva hasta Hondarribia.

Pequeño recorrido cultural

Después de disfrutar del paisaje de la zona, es hora de conocer el pueblo. Lezo tiene un casco antiguo pequeño pero muy bonito, formado por calles empedradas y llenas de arte e historia. Es imprescindible realizar un pequeño recorrido cultural, tomando como punto de partida la plaza de la Santa Cruz, donde se ubica el Ayuntamiento y el tesoro del pueblo, la basílica del Santo Cristo de Lezo.

El Cristo imberbe que podemos ver en ella ha dado fama a esta iglesia a lo largo de los siglos, ya que en toda Europa sólo hay tres de estas características. Desde aquí, atravesaremos la Kale Nagusia (Calle Mayor), admirando diferentes casas solariegas. Al final de la calle, llegados a Andreone, rodearemos la casa y con el puerto como acompañante, descendemos hasta la calle San Juan y continuándola volveremos a la plaza del Santa Cruz, en esta ocasión para tomar la calle Zubitxo y visitar la Arboleda de Lezoandia, la mayor zona verde del municipio. Desde aquí, la Goiko Plaza (Plaza de Arriba) será nuestro destino y atravesando la plaza se asoma la Parroquia de San Juan Bautista. Descendemos las escaleras y volvemos al punto de partida.

Oferta gastronómica para reponer fuerzas

El municipio cuenta también con una oferta gastronómica para reponer fuerzas. Tanto en el casco histórico como en el medio rural podemos encontrar restaurantes que ofrecen cocina tradicional. Además, en el pueblo encontrarás varios parques infantiles para que los más pequeños jueguen.

Más información:

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Instagram: oarsoaldeaturismoa