Ruta pirenaica del Arte Rupestre paleolítico (Francia)

Los valles de la vertiente norte de los Pirineos albergaron, durante el Paleolítico Superior (especialmente entre hace 30.000 y 13.000 años), a grupos de cazadores-recolectores especializados en la caza de ciervos, cabras, caballos, renos y bisontes que organizaban sus movimientos en función de las estaciones y de la existencia de grandes cuevas en donde instalar sus campamentos. La Edad del Hielo dejó evidencias de la vida –y las creencias- de aquellas gentes en las numerosas cuevas de regiones como Ariége, o la cuenca alta del río Garona.

El arte rupestre jugó un papel muy destacado en la vida social y espiritual de estos grupos, y las grandes cuevas de las regiones pre-pirenaicas francesas se convirtieron, además de en campamentos, en grandes santuarios donde se plasmaron creencias y ritos mediante pinturas, grabados y modelados en barro que representaban, principalmente, animales y manos (tanto en positivo, como sobre todo, en negativo).

La ruta parte del gran centro de recepción e interpretación de la región del Ariège, el Parque de la Prehistoria de Tarascon-sur-Ariège, donde grandes y pequeños disfrutarán de infinidad de actividades en un auténtico parque temático dedicado a la vida y el arte del Paleolítico Superior, con recreaciones de cuevas, campamentos de cazadores, audiovisuales y un sinfín de talleres donde tallar la piedra, fabricar armas y utensilios, lanzar flechas con propulsores, o practicar la Arqueología prehistórica. El parque dispone de todo lo necesario para pasar un día en familia, o con amigos, con amplias zonas verdes, espacios expositivos, talleres didácticos, restaurante, tienda y muchas otras sorpresas basadas en la Edad del Hielo.

Desde Tarascon-sur-Ariège podemos visitar hasta 3 cuevas prehistóricas, todas ellas de gran belleza natural y con vestigios artísticos del período Magdaleniense (entre 13.000 y 14.500 años de antigüedad):

La Cueva de Niaux es uno de los grandes santuarios rupestres del Paleolítico mundial, albergando uno de los sitios con pinturas más conocido y mágico, el Salon Noir (o salón negro), donde encontramos un apabullante panel de piedra repleto de bisontes, caballos y cabras, todos ellos realizados en color negro con una maestría equiparable a las pinturas de Altamira o Lascaux.
Muy cerca, en la cueva de La Vache, podremos descubrir el maravilloso arte realizado sobre pequeños soportes móviles (huesos, astas y piedras), con excepcionales figuras de felinos, renos y otros animales típicos de la última Edad del Hielo europea.
La impresionante cueva de Bedeilhac, con una boca capaz de albergar un pequeño aeropuerto, conserva pinturas y grabados de gran belleza, con figuras realizadas en colores ocres y negros.

Desplazándonos hasta la pequeña localidad de Mas d’Azil, nos sorprenderemos con la belleza y grandiosidad de la cueva del mismo nombre, ¡la cual es atravesada por la carretera! Un espectáculo geológico, acompañado de una iluminación sorprendente y sonido, precede a una visita por una cueva cargada de historia y museo en donde descubrir auténticas obras de arte elaboradas sobre astas, dientes, huesos y piedras prehistóricos; también conoceremos qué es el Aziliense…

Desde Foix, la capital del Ariége (Midi Pyrénees), y tras dos horas de recorrido en coche, alcanzamos la localidad de Saint-Laurent-de-Neste (Hautes Pyrénees), donde nos esperan dos espectaculares destinos: la gruta de Gargas y el centro digital de la Prehistoria Nestplori@.

Gargas es la “cueva de las manos”, un santuario paleolítico mundialmente conocido por albergar centenares de manos representadas tanto en positivo como –sobre todo- en negativo, tanto en negro como –especialmente- en rojo, tanto de adultos como de niños. Además, la gruta posee representaciones de animales (ciervos, caballos, bisontes…) y una geología de enorme belleza.

Al lado de la cavidad encontramos un complemento idóneo, el centro Nestplori@, un bello centro tecnificado dedicado a la Prehistoria en general, y a la cueva de Gargas en particular, Descubrir el Paleolítico con las últimas tecnologías será toda una experiencia, en especial para niños y los amantes de las tecnologías de la información.

A poco más de 20 minutos en dirección Oeste, encontramos el Espacio prehistórico de Labastide, pueblecito en donde se encuentra la célebre cueva prehistórica del mismo nombre, decorada con pinturas del período Magdaleniense. Por motivos de accesibilidad, la cueva no puede ser visitada; no obstante, Labastide cuenta con un centro dedicado a la Prehistoria, que permite el acceso al sitio geológico donde se abre la gruta, el campamento prehistórico y un espacio didáctico -ideal para acudir con los más peques- para descubrir el arte del Paleolítico.

CON NIÑOS...

El Parque de la Prehistoria de Ariège, el espacio digital Nestplori@ y el Espacio prehistórico de Labastide son destinos muy adecuados para disfrutar con niños de actividades pedagógicas (talleres, juegos…), y de la naturaleza.

ENCLAVES VISITABLES

Cuevas de Niaux, La Vache y Bedeilhac, Parque de la Prehistoria de Tarascon-sur-Ariège, Museo y Cueva de Mas d’Azil, Cueva de Gargas, Centro de Interpretación Nestplori@, Espacio prehistórico de Labastide.