El gran arte de los cazadores del Paleolítico (desarrollado entre hace 40.000 y 10.000 años) a menudo se relaciona con las cavernas del área franco-cantábrica. Pero desde hace unos años (Siega Verde se descubrió en 1988, y los enclaves de Foz Côa en 1991), sabemos que esto no es así, y que las fabulosas representaciones de animales y signos de la última glaciación también se encuentran en afloramientos rocosos al aire libre, en este caso, asociados a grandes cursos fluviales.
Esta ruta discurre entre dos bellas localidades de la Raya hispano-portuguesa, a caballo de las provincias de Salamanca y la Región Norte de Portugal, ofreciendo dos excepcionales sitios rupestres de valor universal, paisajes asombrosos en la cuenca del río Duero salpicados de ciudades históricas y un sinfín de recursos culturales, gastronómicos y naturales a lo largo de los Arribes del Duero y sus afluentes, el Águeda (Siega Verde) y el Côa.
Partiendo de Ciudad Rodrigo, ciudad medieval y abaluartada de prolija historia y referente cultural y gastronómico del occidente de Castilla y León, encontramos a tan solo 20 minutos (tomando la carretera SA-324 y el inmediato desvío –a la izquierda- de Castillejo de Martín Viejo) el impresionante paraje del puente sobre el río Águeda de Siega Verde, a cuyos pies se diseminan los afloramientos rocosos que albergan uros, caballos, ciervos, cabras y otros animales y signos que componen este singular enclave arqueológico ubicado sobre un vado del río.
Una moderna y tecnificada aula didáctica, que incluye un amplio aparcamiento y otros servicios, recibe al visitante para introducirle en lo que va a descubrir a lo largo de la ribera del río, en un paseo irrepetible por la Prehistoria, a la sombra del impresionante puente que une Castillejo con la frontera portuguesa, primero, y la bella y pintoresca villa abaluartada de Almeida, a continuación.
Las visitas son guiadas por especialistas en Prehistoria y Pedagogía, y pueden incluir talleres y actividades complementarias (consultar programación). Especialmente interesantes son las visitas nocturnas (en torno al verano), que se realizan con apoyo de linternas y que permiten admirar todos los detalles de los grabados y la sutileza de muchas de las representaciones de animales, donde los uros y los caballos esteparios del Paleolítico son los protagonistas absolutos.
El cercano fuerte -con planta en forma de estrella- de Aldea del Obispo y la propia villa de Ciudad Rodrigo son visitas complementarias obligadas.
A escasas dos horas hacia el oeste (desde Ciudad Rodrigo, y pasando por Almeida y Almendra), alcanzamos el tramo final del río Côa y su confluencia con el Duero, dominados por montañas que se despeñan hasta sus riberas. El paisaje es agreste y de una rotunda belleza, y enmarca el formidable conjunto rupestre paleolítico al aire libre del Parque Arqueológico del Côa, junto a la villa de Vila Nova de Foz Côa. Más de 60 localizaciones con rocas decoradas se conocen actualmente, presididas por el impresionante Museo de Côa, una formidable instalación museística completamente dedicada al estudio y la difusión de los valores de los yacimientos rupestres del Parque Arqueológico.
La visita al museo, por sí misma, ya es recomendable (dispone además de todo tipo de servicios, incluido un excelente restaurante), pero si tenemos ocasión de visitar las 3 zonas rupestres que se ofrecen, “Canada do Inferno”, “Penascosa” e “Ribeira de Piscos”, ello colmará todas nuestras expectativas. Las visitas –guiadas por arqueólogos- parten del museo, permitiendo descubrir los valores naturales, paisajísticos y arqueológicos que hacen a esta región del norte de Portugal tan especial y bella. Paneles con decenas de uros, caballos, cabras de impresionantes cuernos, ciervos y signos enigmáticos pueblan las riberas fluviales conformando una de las pinacotecas rupestres más singulares y pintorescas del mundo.
Como en Siega Verde, se ofrecen visitas nocturnas y diversos talleres y actividades (muy recomendables –consultar programación-). La visita a alguna de las bodegas de vinos del Duero (conocidas como “Quintas”), y la compra de productos agroalimentarios tradicionales (aceite, miel, higos, dulces y vinos) son actividades complementarias imprescindibles. Entre febrero y marzo la región asiste al espectáculo de los almendros en flor.
CON NIÑOS...
Los dos enclaves disponen de aulas didácticas, en donde se programan talleres y actividades para niños (con programas para grupos escolares). Las visitas constituyen toda una aventura para los más peques.
ENCLAVES VISITABLES
Zona arqueológica de Siega Verde y Parque Arqueológico de Foz Côa.
RECOMENDACIONES
Ambas zonas arqueológicas comparten la declaración de Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Latitud: 40.599713 | Longitud: -6.530625
Es un producto de BERDEAGO, Asociación Europea para la Sostenibilidad
Plaza Celestino María del Arenal, Nº 3º - 4º Trasera 48015 Bilbao - Bizkaia
Teléfono [+34] 944 967 717