Parque Natural Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas

Parque Natural de Cazorla

Este espacio natural presume de ser la mayor superficie protegida de España con 209.920 hectáreas. Se caracteriza por tener un relieve escarpado de media montaña en el que se entremezclan las paredes rocosas de gran altura con los profundos valles y frondosos bosques de pinos laricios. Entre sus cumbres destacan el de Empanadas y Cabañas con más de 2.000 metros de altitud, y el del Yelmo para la práctica del vuelo libre.

En cuanto a la extensa red hidrográfica que baña el parque, favorece el crecimiento de la gran variedad de flora y fauna que conforma el destino, además de la práctica de numerosas actividades de aventura como un paseo en barca por el embalse del Tranco, senderismo junto al río Borosa o conocer los nacimientos del Guadalquivir y el Segura o el salto de agua de Chorro Gil.

En 1960 fue declarado Coto Nacional de Caza Cazorla-Segura y desde entonces se practica la caza de la cabra montés, ciervo, gamo, muflón y jabalí, especies de las que también se pueden disfrutar, pero de una forma más relajada, en el parque de fauna silvestre del Collado del Almendral, en las inmediaciones de Coto Ríos.

Además es uno de los lugares más visitados para la ornitología y admirar el vuelo del águila real y el buitre leonado.

Entre su flora distinguimos los bosques de pinos laricios, negrales o carrascos salpicados de encinas, robles y áceres. El visitante podrá encontrar especies exclusivas del lugar como la violeta de Cazorla, la lagartija de Valverde, el narciso más pequeño del mundo y una particular planta carnívora. Recomendamos visitar el jardín botánico de Torre del Vinagre, ubicado en la carretera del Tranco (A-319) para conocer mejor la flora más singular de este espacio.

El Parque Natural Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas ha sido el lugar donde han dejado su huella civilizaciones como la íbera, romana o árabe. Por ello, no dejes de visitar las plazas y callejones de Cazorla, municipio escoltado por la sierra de los Halcones, el castillo de la Iruela, la necrópolis ibérica de Toya en Peal de Becerro y la villa romana de Bruñel. La historia de este Parque también está unida a la explotación de la madera y ha sido declarada Provincia Marítima.