Cementerio General de Valencia

Cementerio de Valencia

Como la mayoría de los cementerios de la península, el Cementerio General de Valencia también surge a raíz de la Real Célula promulgada por Carlos III por la cual obligaba a alejar los camposantos del casco urbano y por ende de los aledaños de las parroquias.

Proyectado por el arquitecto municipal C. de Sales, su construcción finalizó en 1807, cuando fue inaugurado. De forma rectangular, según la proyección de origen, está rodeado con un muro y una capilla central que hacía las veces de acceso.

La forma tradicional de enterramiento fue en forma de nicho, el año 1808 y el primer panteón construido es de 1851 aunque rápidamente se generaliza su uso entre las familias más poderosas de la villa.

Con el aumento de población se hizo necesario un proyecto de ensanchamiento que aumentara la capacidad del camposanto. Aprobado el proyecto en 1876, comenzaron las obras de ampliación del rectángulo original dotando de mayor número de nichos y pórticos. En total 170 columnas dóricas ubicadas en el denominado de los "Pórticos" o "Patio de las Columnas".

Algunas ampliaciones posteriores dieron lugar al patio de las palmeras.

Dentro de los más ilustres moradores del cementerio, destacan entre otros los panteones de las familias:  

• Familia Maestre Bosarte: Panteón construido por el arquitecto A. Martorell Trilles
• Familias Puchol Sarthou, Oyanguren, Martínez Boronat, Krausser, Monterde y Pascual: Panteones construidos por el arquitecto J.M. Cortina
• Familia Galindo: Arquitecto Vicente Rodríguez  
• Marqués de Sotelo : Del arquitecto L. Matoses Rico
• Tumba del Barón de San Petrillo: Del arquitecto  J. Rieta Síster  
• Panteón de José y Pepino Benlliure: Obra del arquitecto E. Rieta López
• En el cementerio civil se encuentra la tumba de V. Blasco Ibáñez, obra de Mariano Benlliure, que también realizó las esculturas del panteón familiar de los Moróder.

Localización