Ruta Medieval por la Comarca de Uribe

La Ruta Medieval por la comarca de Uribe te ofrece la oportunidad de conocer desde un punto de vista muy especial seis localidades que tuvieron gran importancia en el Medievo de Bizkaia.

El punto de partida en este viaje a la Edad Media es la localidad de Larrabetzu, donde una columna ubicada junto al Palacio Angulería informa al visitante acerca del Camino de Santiago y la Ruta Juradera en el s. XV. Este itinerario por el que los antiguos señores de Bizkaia juraban acatar y respetar los fueros del territorio y recibían el reconocimiento de su autoridad. Así entre los testigos arquitectónicos que podemos observar, destacan el la Iglesia Juradera de San Emeterio y San Celedonio.

Además Larrabetzu ha sido tradicional lugar de paso dentro del Señorío de Bizkaia, puesto que se ubica en el camino entre Bilbao y Gernika.

La Ruta Medieval continúa en Zamudio, donde el visitante toma conciencia de las duras situaciones causadas por el hambre y las diferencias sociales que padecían la gente de buena parte de Europa. Por otro lado, se limitaban aún más los hábitos alimenticios debido a la fuerte influencia de la religión católica, puesto que estaba prohibido la ingesta de carne durante casi una tercera parte del año, así como los huevos y lácteos durante la cuaresma y el ayuno.

Seguimos hasta llegar a Mungia, donde nos esperan las villas y anteiglesias. En el parque Torrebillela, una columna informa de las dos maneras de organización social. Por un lado, las anteiglesias aparecen en Bizkaia como modelo de gobierno en un territorio despoblado, con una población dispersa en valles y tierras llanas, en un momento en el que el mejor modelo de gestión es el de la asamblea de vecinos en torno a la institución común, la iglesia. Y por otro, las villas como modelo de población con representación también en las Juntas Generales de Bizkaia, nacida mediante fuero otorgado por el Señor de Bizkaia como lugar de mercado y defensa.

De este modo, la fundación de la villa de Mungia surge de la necesidad de proteger a la población del entorno en un lugar seguro y rodeado por una muralla, para combatir los continuos enfrentamientos banderizos de la época.

Nuestra siguiente parada es Gatika, donde la columna informativa próxima al castillo de Butrón nos habla de la vestimenta y tradiciones de la época. Entre las curiosidades que podemos aprender destacan el invento del botón y el hecho de que tocar la mano descubierta de una mujer tenía multa de 15 sueldos. En Gatika, junto a un estratégico meandro del río Butrón, se levanta desde el siglo XI la originaria torre de los Butrón, uno de los linajes más importantes y antiguos de Bizkaia y cabeza del bando oñacino. La propiedad y su enclave constituían una unidad económica autónoma, con su propio molino y ferrería. Hasta muy cerca del castillo llegaban desde Plentzia las barcazas con mineral de hierro procedente de los yacimientos encartados.

Proseguimos camino hasta Erandio, dónde en las proximidades de la torre Martiartu, se nos informa de los linajes medievales. En este punto se aprende sobre las Guerras de Banderizos, que marcaron la baja Edad Media en Bizkaia. En estas luchas, los distintos linajes se agrupaban bajo los estandartes oñacinos, de la casa de Butrón, o los de los gamboinos, de la casa Mújica. En paralelo se describe con detalle todo lo relacionado con las casas torre y castillos de Bizkaia.

La ubicación estratégica de Erandio y su emplazamiento a orillas de la ría del Nervión, así como su proximidad a la villa de Bilbao, han condicionado allí la convivencia de las actividades artesanales e industriales (las ferrerías) con un carácter rural en los barrios cercanos a la anteiglesia. Las entidades de Erandio Goikoa y Goiherri conservan un notable patrimonio monumental, herencia de importantes linajes. Mención especial requiere la Torre de Martiartu, una de las más bellas de Bizkaia.

Llegamos al final del recorrido al alcanzar Plentzia, (la Villa de Plentzia de Butrón) fundada en un enclave estratégico, en el último de los meandros que forma el río Butrón antes de su desembocadura. Junto con la pujante industria naval hicieron de su puerto uno de los más importantes del Cantábrico en una época en la que florece el comercio marítimo, al igual que el terrestre.

En Plentzia podemos visitar la iglesia de Santa María Magdalena, antiguas casas marineras y los palacetes construidos por la burguesía en el siglo XIX. El edificio del Torreón es uno de los elementos más antiguos y relevantes del municipio, actual sede del Museo Marítimo de Plentzia. Más información en la Oficina de Turismo de Plentzia.