Mercado Central de Tarragona

El Mercado Central es el primer mercado que se construyó a principios del siglo XX, con el objetivo de sustituir los mercados al aire libre por espacios cubiertos con más comodidades por los usuarios y con mejores condiciones sanitarias.

En septiembre de 1911 el Ayuntamiento aprobó su construcción y el edificio fue encargado al arquitecto municipal Josep M. Pujol i de Barberà. El 19 de diciembre de 1915 fue inaugurado el edificio modernista.

DESCRIPCIÓN

La construcción cuenta con tres naves, de las cuales la central es la más alta. Otra nave transversal que corta por el medio a las anteriores y se orienta hacia las puertas laterales. Los muros están abiertos por grandes ventanales, que favorecen la iluminación natural. El edificio se asienta sobre una base rectangular, con una estructura metàlica y de hormigón que descansa sobre columnas de hierro, que sostienen arcos apuntados, sobre los cuales se extiende la cubierta de madera.

El Mercado dispone de una planta dedicada a la venta al por menor con una superficie de 2.500 m², y una segunda planta de 600 m² donde se encuentran las cámaras frigoríficas y los otros servicios para los concesionarios del Mercado. El año 1998 se construyó un aparcamiento sótano para 423 vehículos.

El 22 de marzo de 2011, comenzaron las obras de rehabilitación del Mercado Central, cerrado desde el año 2007, cuando los vendedores fueron trasladados a una carpa junto al viejo edificio con el fin de no desplazar el centro comercial. Dicha rehabilitación incluía la restauración del edificio modernista con la rehabilitación de la fachada y la reposición de la cubierta interior y exterior, recuperando su estado original.